Información, rutas, dificultad y puntos de interés
Si has llegado a este blog es porque estás pensando en hacer el Camino de Santiago. ¡Qué bien! Puede ser una experiencia muy bonita, tanto si lo haces por razones espirituales, religiosas, por curiosidad o por actividad física.
El Camino de Santiago es una de las rutas de peregrinación más emblemáticas del mundo. Constituye una red de rutas que cubren casi toda España y parte de Portugal, y miles de peregrinos, tanto nacionales como internacionales lo realizan cada año.
El funcionamiento es muy básico: levantarte, desayunar y caminar, día tras día. A esto se le suma la pausa del café o del almuerzo en algún punto de la ruta, encontrar alojamiento o cama al final de cada etapa, lavar la poca ropa con la que viajas y conseguir comida para cenar y para el día siguiente. Todo muy mecánico.
Pero a medida que pasan los días, estas tareas se automatizan y empiezan a involucrarse más cosas, como la sensación del cuerpo al despertar pidiéndote caminar, conocer a la gente que hace el Camino a la vez que tú, los momentos en soledad en medio de un bosque, o el placer de mojar los pies en el mar tras horas de caminar.
¿Te han entrado todavía más ganas? Encuentra en este blog información útil cómo las diferentes rutas entre las que puedes escoger, su dificultad, cómo preparar tu mochila para el Camino o dónde conseguir La Compostela al llegar a Santiago.
La historia del Camino de Santiago se remonta a la época de Jesucristo cuando, tras morir el Apóstol Santiago, dos discípulos decidieron llevar sus restos a Galicia, como el propio apóstol había deseado.
Tuvieron que pasar 800 años, para volver a saber de Santiago, cuando se dice que el ermitaño Pelayo descubrió una tumba con sus restos en el pueblo gallego de Padrón. La leyenda cuenta que fue un campo de estrellas las que le indicaron el lugar, un Campus Stellae, el posible origen de la palabra Compostela.
Cuando El rey Alfonso II de Asturias supo del descubrimiento de los restos del Apóstol, peregrinó hasta el lugar para ver los huesos con sus propios ojos. Saliendo desde Oviedo, y sin saberlo, caminó el primer Camino de Santiago, el Camino Primitivo. Más tarde, para que otros monarcas europeos y peregrinos devotos pudiesen ir a adorar la tumba, ordenó construir un templo para guardar los restos. Este templo fue el inicio de la Catedral de Santiago.
Desde entonces hasta ahora, el Camino atrae a muchos peregrinos, que lo caminan tanto por motivos espirituales, religiosos o no, como por motivos culturales. Es, por ejemplo, habitual oír a muchos peregrinos que su razón principal es encontrar una respuesta. Caminar solo/a, día tras día, con momentos en silencio, funciona como una especie de meditación dejando que las ideas bailen libremente por la mente, creando nuevas conexiones y, con suerte, ¡alguna respuesta!
Hay muchas razones por las cuales una persona se decide a hacer el Camino de Santiago. Aun teniendo un origen cristiano, hoy en día la mayoría de los peregrinos lo realizan por otros motivos, tanto espirituales como no. Todas las opciones son aceptadas y respetadas.
Pero el Camino es mucho más, el camino también es:
Una conexión con la naturaleza
Un desafío personal
Encontrarte con personas de todo el mundo
Un viaje cultural
Un espacio para la reflexión
Desconectar de la vida moderna
Sensación de logro al acabarlo
Diversidad de rutas y paisajes
Fomento del turismo sostenible
En este mapa puedes ver las principales rutas del Camino de Santiago.
¿El Camino de Santiago es difícil? Depende. No es fácil responder, ya que hay que valorar tu estado físico, qué Camino o qué etapas quieres hacer, y cuántos días seguidos planeas caminar.
Aquí debajo resumimos la dificultad de los principales Caminos. Para ver más detalles, entra en cada uno de ellos.
Aunque es el tramo del Camino más popular, su dificultad es media debido a las etapas más o menos largas y a un par de ascensos de 400-500 metros.
Moderado I 114 km I 5-6 días I 15-24 km al día
El Camino Portugués es de los más fáciles, pero el tramo que transcurre en tierras gallegas es más ondulantes y casi todas las etapas superan los 400 m de ascenso.
Fácil-moderado I 114 km I 5-6 días I 18-25 km al día
Debido a las dos primeras etapas, de hasta 30 km, definimos el Camino Lebaniego como moderado. Pero añadiendo una noche más, puedes bajar a un máximo de 20 km al día, con pocos ascensos.
Fácil-moderado I 72 km I 3-4 días I 15-30 km al día
La primera mitad del Camino Sanabrés tiene pocos sobresaltos, pero como ya hemos visto, en la segunda mitad que incluye los últimos 100 km, los ascensos no bajan de 450 m diarios.
Moderado I 370 km I 13-14 días I 22-33 km al día
El Camino Inglés es sencillo de seguir, sin etapas oficiales muy largas y con desniveles poco pronunciados. Le añadamos moderado por una de las etapas, hacia el final, que es algo más exigente.
Fácil - moderado I 119 km I 6 días I 15-24 km al día
Es el segundo Camino más popular debido a la facilidad de las rutas, prácticamente llanas. A esto hay que añadir el hecho de tener el mar y la brisa marina siempre cerca.
Fácil I 240 km I 11-12 días I 15-28 km al día
La primera mitad del Camino Sanabrés tiene pocos sobresaltos, pero como ya hemos visto, en la segunda mitad que incluye los últimos 100 km, los ascensos no bajan de 450 m diarios.
Moderado I 370 km I 13-14 días I 22-33 km al día
El Camino Primitivo es uno de los más exigentes debido al desnivel que los peregrinos se encuentran antes de llegar a Galicia, donde han de superar un par de puertos de montaña. Una vez en Galicia, las etapas se vuelven más asequibles.
Moderado - alto I 313 km I 14-16 días I 16-25 km al día
El Camino Portugués es el más fácil si hablamos de desnivel y longitud de las rutas. La dificultad de este Camino es su longitud si queremos hacerlo al completo, y caminar desde Lisboa hasta Santiago, casi un mes sin contar días de descanso.
Fácil I 620 km I 24-26 días I 18-30 km al día
Si hacemos una media, podríamos decir que la dificultad de la Via Podiensis es moderada. Pero en un par de tramos, hacia la mitad entre Cahors y Lectoure, y el final, llegando a la frontera con Francia, se empiezan a acumular ascensos y descensos que se notan al final del día.
Moderado-alto I 740 km I 30-34 días I 20-30 km al día
Si te planetas hacer el Camino completo, la dificultad es alta ya que estamos hablando de más de un mes caminando cada día, pero por lo general, las etapas no son difíciles. Podemos clasificar el Camino Francés como fácil exceptuando el primer y el último tramo, con más desnivel.
Fácil-moderado I 770 km I 30-35 días I 20-26 km al día
Conocido como uno de los más exigentes, junto con el Camino Primitivo, por algunas etapas con desniveles importantes. Las primeras etapas del Camino del Norte testean sin tregua las piernas del más entrenado peregrino, pero los bosques y paisajes costeros merecen el esfuerzo.
Moderado-alto I 825 km I 34-37 días I 18-30 km al día
Lo más difícil de este Camino es hacerlo al completo de una vez, pudiendo llegar a los 40 días caminando si no tenemos ningún contratiempo. Pero por lo general, las etapas son bastante llanas, a excepción de un par de etapas que llegan a ser moderadas.
Fácil-moderado I 964 km I 36-39 días I 20-25 km al día
Preparar la mochila para hacer el camino de Santiago es uno de los puntos más complicados para los futuros peregrinos. Algo positivo es que el contenido va a ser prácticamente el mismo escojas la ruta que escojas, y solamente tendrás que tener en cuenta la época del año en la que viajas, si vas a necesitar más ropa de abrigo o no. Haz tu lista de qué meter en la mochila con nuestras sugerencias.
Por lo general, la mejor época para hacer el Camino de Santiago es en primavera y en otoño. Pero ten en cuenta que no eres la única persona que lo piensa, y si buscas algo más de soledad, tendrás que buscar alternativas.
Los meses de verano también son populares, sobre todo agosto debido a las vacaciones. Si decides hacer un Camino en agosto tendrás que valorar la temperatura de la zona y tener en cuenta que algunos recorridos están tan concurridos que encontrar cama o alojamiento también se hace difícil, a menos que te apoyes en una agencia de viajes que lo organice por ti.
Hacer el Camino de Santiago es para muchos una experiencia única, sea la razón que sea que le mueva a hacerlo, y que permite a cada peregrino escoger cómo vivirla. Muchos prefieren conectarse consigo mismo o con la naturaleza en solitario, otros disfrutan de compartir la experiencia con amigos o pareja, y otros optan por unirse a un grupo de desconocidos que en poco tiempo se convierten en compañeros de ruta.
Cada opción es válida, y dependerá del carácter, las expectativas y las necesidades de cada persona. En este otro artículo hemos recopilado comentarios de peregrinos para que conozcas sus razones y experiencias de primera mano.
No hay una opción más buena que la otra. Mucha gente va a defender que el Camino durmiendo en hoteles no es hacer el Camino, que hay que experimentar los albergues. Y hay parte de razón si buscas esa experiencia, pero cada persona tienes sus propias necesidades, y razones por las que escoger entre hoteles o albergues.
Mucha gente necesita un espacio propio y en silencio para conciliar el sueño, o no pueden arriesgarse con según qué colchones por problemas de espalda. Y otras personas tienen la facilidad de poder dormir en dormitorios comunes. Algo a tener en cuenta es que si te alojas en hoteles o pensiones, te ahorras el peso del saco y la esterilla.
Escojas la opción que escojas, ten en cuenta que en épocas de gran afluencia vas a tener que ‘correr’ para encontrar un lugar en un albergue de peregrinos o reservar un hotel o pensión con anterioridad.
El Camino de Santiago es una de las rutas de peregrinación más antiguas y famosas del mundo que culmina en la catedral de Santiago de Compostela. Aquí, en la catedral donde se dice que se encuentran los restos del apóstol Santiago, los peregrinos reciben una recompensa muy especial al acabar el Camino: la Compostela.
Conoce más sobre el origen de la Compostela y cómo obtenerla.
Horarios de apertura: 9:00 – 18:00
Horarios de apertura: 9:00 – 18:00